25 de marzo de 2018

Amor-Libertad-PoliAmor (1/3)

Debate sobre el amor en libertad y el poliamor 
El pasado mes de febrero tuvimos una interesante charla sobre el tema del poliamor en la asociación cultural la Barraca (Collado Villalba, Madrid), en la que contamos para su introducción con Jorge Roldán, miembro de Poliamor Madrid (https://poliamormadrid.org/) Comentamos a continuación algunos aspectos de la conferencia y su posterior debate, para pasar después a profundizar en varios temas relacionados con el poliamor (en tres post).

Primero la definición. Según la web citada: “El poliamor consiste en amar a varias personas a la vez de manera consensuada, consciente y ética. Quienes lo defendemos creemos que el amor no tiene que estar restringido: si amas a una persona deseas lo mejor para ella, y eso incluye poder ampliar su vida amorosa y sentimental.”
Por su parte, en la Wikipedia encontramos otras definiciones y reflexiones, y en concreto una bastante sencilla “Poliamor es un neologismo que significa tener más de una relación íntima, amorosa, sexual y duradera de manera simultánea con varias personas, con el pleno consentimiento y conocimiento de todos los amores involucrados”.
Lo que deducimos de las definiciones es que el concepto de Poliamor es inseparable de los de confianza mutua, información, transparencia, pluralidad afectiva, relaciones con consentimiento mutuo, ética y honestidad. El poliamor va ligado a cuidados y a compromiso, lo importante es la lealtad. En un primer momento, parece que los celos y la inseguridad pueden parecer lo más difícil de gestionar en el poliamor, pero son la lealtad y el compromiso tal vez los aspectos más complejos de la relación.
Se incide en estos aspectos, 1º para diferenciarlo claramente de lo que han sido las tradicionales relaciones poligámicas, donde una persona (habitualmente el varón) tiene relaciones con otras, que podían ser secretas o, a lo sumo, consentidas, pero uno es el que domina en las relaciones y controla la información, informa solo de lo que quiere a las demás personas con las que mantiene relaciones. Estas son las relaciones típicas del patriarcado y han quedado asumidas socialmente en las sociedades patriarcales clasistas ya que, salvo excepciones, este tipo de relaciones son practicadas en exclusiva por los miembros varones de la clase dominante, al menos de una forma estable.
Polyamor esta mal, es mejor multiamor o polifilia,
porque mezclar raices griegas y latinas esta mal
De la definición teórica y de la práctica concreta del poliamor deducimos por tanto que el poliamor va de la mano del feminismo, inseparablemente. No se entiende uno sin el otro. Se asume radicalmente y como punto de partida la igualdad de derechos entre todas las personas.
2º. En el debate sobre el poliamor también se incide, y se repite una y otra vez, que las relaciones amorosas no son solo las relaciones sexuales. El amor es más y mucho más.
En varios de estos aspectos, Jorge Roldán (volviendo a la charla citada) explicó la cantidad de hechos y tipos de relación para los que nos faltan palabras, no tenemos las denominaciones adecuadas. Se están utilizando y copiando conceptos y palabras en inglés para muchos aspectos, a veces inadecuadamente, ya que es muy difícil: no significan lo mismo en cada idioma, van cargados de intencionalidad, sesgo o contenido cultural.
El propio neologismo “poliamor” es una mala traducción de poliamory que en inglés no significa exactamente poliamor (polilove). El concepto se empezó a utilizar en California (San Francisco) en los años noventa. Se incidía más, en su versión original, en las relaciones afectivas y menos en las sexuales.
Nos faltan palabras para definir en lo concreto, es realmente romper los grises. Así, por ejemplo, lo que en español denominamos tener un “amigo/a íntimo”, está cargado de sexualidad. Mejor es decir que tenemos una “íntima amistad”, para referirnos a tener amigos de verdad, de los de siempre, los de confianza total, no los de Facebook. En inglés close friend, no se puede traducir por “amigo cercano”. Nos estamos refiriendo a ese tipo de amistad en que la confianza, el cariño y el afecto se suman, esto es lo importante, y, además, pueden dar lugar a relaciones íntimas ocasionalmente, como ampliación o parte de la amistad directa.
3º. En el poliamor el que las relaciones sean conocidas por los participantes no significa una convivencia múltiple, aunque no se excluye. También pueden ser conocidas o consentidas en diversos grados, no significa conocerlo todo, ni informar de cada paso o actividad. Conocer o consentir no significa conocerlo todo. También puede surgir el poliamor como la asunción de una realidad dada, fruto de un proceso.
4º Hay diferentes tipos. Puede ser Poliamor Jerárquico, cuando hay una relación principal. Significa, por ejemplo, que hay una relación más continua o frecuente entre dos personas y con otra es menor, por ejemplo porque viva fuera, por razones laborales, etc. Pero igualmente la lealtad e información se tienen que dar entre todos para que se considere poliamor.
Puede ser sin jerarquía. Puede ser entre tres, cuatro o más personas. Se puede dar en un grupo en convivencia. Varias personas que viven juntas y practican el poliamor entre ellas de forma consentida por todas.

En este caso, si el grupo es de más de tres personas, se aproximaría a las “comunas” del movimiento hippy, que practicaban el denominado “amor libre”, y comenzaron a crearse en los años 60 y 70 del siglo pasado. Pero en el concepto de amor libre se considera relaciones más abiertas y fluidas, sin estabilidad, con un alto grado de variabilidad, algo bastante común en estas décadas entre la juventud. Caso diferente era el caso de comunas creadas en zonas apartadas, como algunas que se crearon en pueblos abandonados, donde sí se practicaban relaciones estables en un determinado grupo.
Puede ser una relación consentida cerrada, en la que no se admite que sus participantes puedan tener relaciones con otras personas fuera del grupo, o puede ser abierta, en la que no se excluyen otras relaciones, de diferente tipo. En el sentido de lo que se denomina “anarquía relacional”, que, pienso, sería un paso más, más abierto y explícito que lo que tradicionalmente (oficialmente) se entiende por poliamor:
“Los anarquistas relacionales acostumbran a creer en el consentimiento natural y buscan el consentimiento explícito en la mayoría de los ámbitos de una nueva relación. Cuando construyen una relación nueva con alguien, los anarquistas relacionales confían plenamente en el consentimiento implícito, entendiendo que es revocable y revalidándolo frecuentemente con su pareja. Los anarquistas relacionales pueden usar etiquetas como "pareja" o "amante", pero no las usan para delegar consentimiento basándose en normas sociales (por ejemplo, la comprensión de otras personas sobre lo que estos términos significan). El consentimiento puede ser explícito o implícito, y un consentimiento implícito indefinido en el tiempo se basa en una conversación explícita. Los anarquistas relacionales definen a menudo sus relaciones, incluso las que tienen una etiqueta, a través del consentimiento”. https://amorsplurals.cat/2016/08/29/anarquia-relacional-i-consentiment/
El consentimiento es por tanto el pilar fundamental de la anarquía relacional. Normalmente hablamos de pareja y amistades, diferenciando entre las personas con las que tenemos sexo o no. El poliamor, y más la anarquía relacional, rompen con esas etiquetas.




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